Según datos de Forbes, en 2020 la familia del presidente Sebastián Piñera (BTG Pactual y Credicorp Capital) pasó de tener una fortuna de US$2.600 millones en marzo, a una de US$2.900 millones diciembre. A pesar de la pandemia, su riqueza aumentó en un 11,5%.
El 2020 no fue del todo malo para la familia Luksic (Antofagasta Minerals, CCU y Banco de Chile). De hecho, la fortuna de Iris Fontbona y Cía. aumentó en un 84,2%.
En marzo estaba avaluada en US$10.800 millones y en diciembre alcanzó los US$19.800 millones.
Por último, el controlador de SQM, Julio Ponce Lerou, empezó el 2020 con US$1.700 millones y lo terminó con US$3.500 millones.
Hace poquito fue beneficiado con una rebaja de la multa por Caso Cascadas, tenía que pagar US$70 MM y pagó solo US$3 MM – habiendo defraudado US$128 MM-.
Todo esto sucede mientras se ha dejado en el más completo abandono a la clase media. Chile mantiene niveles de cesantía que superan un 20% real y el gobierno se ha negado a crear un impuesto a los super ricos para poder financiar parte de la crisis.
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